Los procuradores son una figura importante del sistema jurídico y que se encargan de la comunicación jurídica/formal, entre los poderes judicial y los ciudadanos, incluyendo los abogados, que también forman parte del proceso judicial, ayudando a garantizar el total desarrollo de la justicia. Eso sí, el código civil y el penal dicen que es obligatorio contratar un procurador cuando hay que comparecer en determinadas y complejas causas judiciales.
Puede decirse que el procurador es el que tiene que encargarse de que las comunicaciones entre los abogados y los juzgados tengan la fluidez debida, de tal forma que el abogado tenga siempre información de lo que sucede en el procedimiento.
Desde los procuradores de Sevillaflores.es creen que si se conociera más el trabajo que realizan estos profesionales, serían más valorados. El procurador examina y sigue todos lo escritos que va resolviendo el juzgado y las notificaciones que hacemos llegar a los abogados de las dos partes. Cuando contamos con un procurador, hay que conocer el partido judicial en el que presta el servicio, puesto que en el caso de que tengas abierto un proceso judicial, tienes que solicitar los servicios del procurador donde te encuentres.
Ellos básicamente hacen llegar al abogado la totalidad de información que va saliendo de la salas de justicia, velando también porque los procesos judiciales puedan cumplir con las normas que se establezcan y donde ellos tienen que aplicar la totalidad de las normas para el enjuiciamiento que se establezcan, algo para el cual hay que tener un elevado conocimiento del derecho procesal.
¿Qué funciones tiene un procurador?
La totalidad de las funciones que realiza el procurador se encaminan a facilitar el desarrollo del proceso judicial, evitando también que los que están sometidos a un proceso judicial no tengan el debido cumplimiento con los pasos establecidos o terminen cometiendo acciones que sean fraudulentas.
Lo más importante para ellos es realizar un seguimiento con la debida exhaustividad del caso y que cuenten los abogados con la debida información sobre el desarrollo de sus respectivos casos.
Este profesional se encarga de hacer todos los trámites que competen al proceso judicial, donde destacamos los típicos actos de comunicación en los procesos,, los necesarios requerimientos y citaciones, notificaciones, emplazamientos, donde después de cada trámite que realiza, es obligatorio que informe de todo al abogado.
Entre otras funciones más que tiene es la de proceder a la entrega al abogado de la totalidad de los documentos que sean relativos al caso y que le lleguen, siempre velando por los intereses de los clientes.
Los procuradores son los que se encargan del pago de todos los gastos que se van generando en el proceso judicial según las instancias del cliente y que una vez se cancelan, es necesario justificar los gastos ante los clientes.
En cuanto al cumplimiento de las funciones, el procurador va a tener que contar con un gran conocimiento de cómo funciona el sistema judicial, puesto que en todo momento será necesario hacer una evaluación de si el proceso evoluciona de manera normal o si se encuentran visos de que exista legalidad.
¿Qué requisitos existen para ser procurador
Lo primero que tiene que tener un procurador es ser un verdadero profesional. Para ello debe tener un título universitario como puede ser el de Licenciado o Graduado en Derecho y otros títulos que habiliten para ejercer la profesión en el tribunal que lleve el caso.
En la actualidad es necesario que quienes deseen ser procuradores, deberán tener un Máster Universitario de Acceso al ejercicio de la Abogacía.
Los procuradores son unos profesionales universitarios especializados, algo que es importante cuando lo que se quiere es agilizar la administración de justicia, la cual se tiene que adaptar a los nuevos tiempos en que vivimos así como asumir los distintos retos que imponen los muchos cambios que ha ido sufriendo esta interesante profesión por la gran evolución que se ha producido del sistema legislativo.
Como dicen los propios profesionales, debería ser una profesión más conocida, pero lo cierto es que todo el mundo sabe cuál es el trabajo de un juez o de un abogado, pero poca gente sabe algo del trabajo del procurador. Solo saben algo más cuando se ven en algún caso, porque de lo contrario seguirían siendo ignorándolos.
A ellos parece no molestarles del todo, quizá porque en la justicia al menos suelen estar bien considerados y casi que es mejor no llamar la atención en el mundo legal.
Esperamos que después de este artículo sepas algo más en qué consiste un trabajo que viene de la época romana, pero que no todo el mundo conoce como debiera. Ahora tú sabes un poco más.