¿Tu familia es la típica que va a su bola hasta en la comida y cada uno pilla lo que puede en la nevera cuando llega a casa?, ¿cenas en el sofá, comes mientras haces otras cosas y no desayunas en casa para ahorrar tiempo y dormir unos minutos más? Pues bien, según l@s profesionales de la salud, estás haciendo muy mal, porque comer en familia y compartir la mesa, es una actividad muy beneficiosa para lograr el equilibrio físico y mental, y ayuda a los reforzar los lazos familiares y a aprender valores. Además, se fomenta la comunicación y el compartir ideas, impresiones y sentimientos. No siempre se le da la importancia que tiene, por eso, en este post, te vamos a explicar por qué compartir la mesa constituye una actividad tan sana.