Como una especialidad de la odontología, la ortodoncia se encarga del estudio, prevención, tratamiento y diagnóstico de las anomalías de función o posición en las estructuras dentales y maxilofaciales. El ejercicio de la ortodoncia es el diagnóstico, prevención y corrección de las alteraciones y mantenerlas en un estado de salud y armonía óptimos mediante el uso de distintos elementos. Esta necesidad de corregir los dientes irregulares o salientes viene desde la antigüedad, hay constancia del hallazgo de aparatos ortodónticos muy perfeccionados, pertenecientes a las civilizaciones griegas y etruscas.
La odontología actual aplica dos sistemas de aparatos: La aparatología fija, los brackets gemelares de adhesón directa, en ambas arcadas dentarias. Son elementos adheridos a los dientes, bandas y brackets, a los que se anclan firmemente unos finos arcos elásticos de aleación metálica -puede ser titanio o níquel-, mediante un conjunto de ligaduras.
Los brackets removibles pueden ser retirados de la boca por el propio paciente, para la higiene bucal y durante las comidas. Estos aparatos solucionan maloclusiones sencillas y con menos molestias para los pacientes. En la corrección de los maxilares se emplean mucho, y sobre todo como tratamiento en dentición temprana o infantil, en este caso se corrigen perfectamente determinados estados patológicos si se diagnostican a tiempo, haciendo innecesario en muchos casos un tratamiento en la dentición definitiva, o que sea muy puntual y breve.
Los alineadores transparentes son aparatos removibles, y uno de los tratamientos de la ortodoncia actual más demandados. También se denominan ortodoncia transparente, ortodoncia de alineadores.
Los alineadores invisibles y su gran aceptación social
La Odontología está viviendo una revolución en los últimos años, especialmente por los avances tecnológicos, en parte por evolucionismo social. Desde el bambú o el marfil, pasando por metales nobles, aleaciones como el acero o el nitinol, la goma vulcanizada, el caucho elástico, hasta llegar a los poliuretanos termoplásticos. Las técnicas y los materiales han cambiado, y la odontología en general debe adaptarse a las nuevas tecnologías. Los alineadores invisibles ya forman parte del día a día de casi todas las clínicas dentales de España, y en algunos casos superar los tratamientos con aparatología convencional. La ortodoncia invisible está experimentado un crecimiento exponencial en nuestro país en los últimos años, y la certificación en ortodoncia con alineadores es una exigencia curricular para todo odontólogo que comience en una clínica. Sólo los odontólogos pueden diagnosticar y prescribir estos tratamientos, y en esto sí debemos ser tajantes, los sistemas que van apareciendo del “hazlo tú mismo”, referido al paciente, no deberían nunca interferir en las buenas prácticas de la odontología de los profesionales.
Tratamiento de ortodoncia con brackets , para todos
El tratamiento de brackets consigue una gran efectividad para remodelar la estética dental del paciente. Para ello, seguir los pasos de la ortodoncia tradicional se ha demostrado como uno de los medios más eficaces en la corrección de los apiñamientos dentales, malposición y otros problemas dentales. No importa la edad, y no solo es un tratamiento para niños, adolescentes o personas jóvenes. Unos brackets consiguen excelentes resultados en todos los pacientes, recolocando sus piezas dentales originales y consiguiendo sonrisas mucho más atractivas.
Si estás en Toledo, y necesitas que te vea un odontólogo y te aconseje sobre ortodoncia, lo has ido dejando pasar y ves que es algo que tienes que hacer, la Clínica Dental SEDI de Toledo cuenta con especialistas en tratamientos con brackets para corregir esos defectos de posición de tus dientes que en algunos momentos tanto te pueden incomodar, y sabes que con un poco de paciencia y atención a ti mismo/a puedes solucionar, en un plazo que se pasará muy pronto. Los beneficios son para siempre, no te vas a arrepentir, al contrario, ¡Pensarás que es la mejor inversión que has hecho! Y no solo por la estética, pues también repara problemas estructurales de los maxilares y de los dientes, por lo que es un tratamiento que mejora tu salud bucal y general. La ortodoncia soluciona problemas complejos, como puede ser el paladar estrecho, la maloclusión, mordida cruzada, y otros problemas estructurales de la boca.
Una de las dudas que surgen si necesitamos un tratamiento de brackets, es saber si duelen, algunas veces lo habrás oído comentar. La realidad es que no es un proceso para nada doloroso, y tanto su colocación como en el día a día de los pacientes que lo llevan no comportan dolor. Tan solo puede provocar algunas molestias, fáciles de asumir, a la hora de ajustar los tornillos en cada revisión, que suele ser una vez al mes, se aprietan o aflojan los tornillos para que el aparato siga haciendo su trabajo correctamente.
Cómo mejorar las pequeñas molestias que pueden causar los brackets
En algunos casos, el tratamiento de brackets causa sensibilidad en los dientes, inflamación de encías, pequeñas llagas, más comunes en el periodo de adaptación. Pero la mayor parte de estas molestias desaparecen cuando el tratamiento va muy avanzado y la presión sobre los dientes es menor, y en otros casos se minimizan con una buena higiene dental y algunas sencillas recomendaciones como éstas:
- Evitar los alimentos duros y adaptar la dieta, teniendo en cuenta su textura y consistencia, eligiendo aquéllos menos traumáticos para la musculatura bucal y los dientes, mejor purés y alimentos blandos. El objetivo es conseguir que el trabajo de nuestra dentadura sea mínimo, para aliviar el dolor de los primeros días del tratamiento.
- Si durante la primera semana aparecen irritaciones o llagas en los labios, mejillas o lengua por el roce con el aparato, hay que considerar que son pasajeros, y pueden solucionarse con el uso de cera de ortodoncia y enjuagues bucales con agua tibia y sal, para ayudar a la cicatrización. Evitar los alimentos muy ácidos.
- Si llevas brackets debes ser muy cuidadoso con la higiene dental, utilizando cepillos interproximales, cepillados más prolongados, uso de hilo dental, colutorios, irrigadores bucales, dentífrico con flúor especial, para cuidar las encías, además de un enjuague bucal antibacteriano. Con todos estos cuidados las mínimas molestias del tratamiento desaparecerán y el tratamiento será muy efectivo.