La diabetes es una enfermedad crónica que afecta a millones de personas en todo el mundo. Tanto que la Federación Internacional de Diabetes estima que 537 millones de adultos en todo el planeta sufren diabetes, tal y como se explica en este artículo. Esta enfermedad se caracteriza por niveles elevados de azúcar en la sangre, ya sea debido a la falta de producción de insulina en el cuerpo (diabetes tipo 1) o a la incapacidad del cuerpo para utilizar eficientemente la insulina que produce (diabetes tipo 2). Esta condición puede tener un impacto significativo en la salud y el bienestar de las personas que la padecen. Por eso, en este artículo vamos a explicar algunas de las principales consecuencias de la diabetes y cómo afectan a las personas que viven con esta enfermedad.
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Complicaciones cardiovasculares
Las personas con diabetes tienen un mayor riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares, como enfermedad coronaria, infarto de miocardio, insuficiencia cardiaca y accidente cerebrovascular.
Esto se debe a que los altos niveles de azúcar en la sangre pueden dañar los vasos sanguíneos y afectar la circulación, lo que aumenta la probabilidad de problemas cardíacos.
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Problemas oculares
La diabetes también puede afectar los ojos y provocar problemas de visión. La retinopatía diabética es una complicación común que causa daño a los vasos sanguíneos de la retina, lo que puede resultar en pérdida de la visión o ceguera si no se trata adecuadamente. Además, las personas con diabetes también tienen un mayor riesgo de desarrollar cataratas y glaucoma.
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Problemas de los nervios
La neuropatía diabética es una complicación que afecta los nervios periféricos, especialmente en las extremidades del cuerpo. Esto puede resultar en entumecimiento, hormigueo, debilidad muscular y dificultad para cicatrizar heridas. En casos graves, la neuropatía diabética puede ocasionar úlceras en los pies que pueden infectarse y dificultar la curación, lo que puede llevar a amputaciones.
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Problemas renales
La diabetes es una de las principales causas de enfermedad renal crónica. Los altos niveles de azúcar en la sangre pueden dañar los vasos sanguíneos de los riñones, lo que afecta la capacidad para filtrar adecuadamente los desechos y el exceso de líquidos del cuerpo. Con el tiempo, esto puede llevar a la insuficiencia renal y requerir diálisis o incluso un trasplante de riñón.
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Problemas de pie
Las personas con diabetes son propensas a desarrollar infecciones en los pies. Esto se debe a la mala circulación y la neuropatía diabética, ya que pueden provocar úlceras en los pies que no cicatrizan adecuadamente y que, si no se tratan, pueden infectarse y causar complicaciones graves. Esto se denomina comúnmente como pie diabético.
“Existen dos riesgos importantes en el pie diabético, el déficit de aporte sanguíneo y la disminución de la sensibilidad. Esto puede provocar la formación de úlceras en el pie, y en casos más graves, derivar en una amputación. Los podólogos tratamos esta afección para realizar un análisis exhaustivo del pie, una valoración neurológica y vascular para la prevención de lesiones y úlceras. Y garantizamos un tratamiento personalizado para cada caso”, explican desde la Clínica del Pie Marta García, centro de podología de referencia en Albacete.
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Problemas sexuales
Además, hay que indicar que la diabetes puede afectar la función sexual en hombres y mujeres. En los hombres, puede causar disfunción eréctil y dificultad para mantener una erección lo suficientemente firme como para tener relaciones sexuales. Mientras que en el caso de las mujeres, la diabetes puede provocar sequedad vaginal, disminución del deseo sexual y dificultades para alcanzar el orgasmo. No obstante, un buen control de la diabetes y la búsqueda de tratamiento médico pueden ayudar a abordar estos problemas sexuales.
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Infecciones
Y la última complicación de la que vamos a hablar en este artículo es que las personas con diabetes tienen un mayor riesgo de desarrollar infecciones, especialmente infecciones de la piel y del tracto urinario. Esto se debe a que la diabetes debilita el sistema inmunológico y dificulta la capacidad del cuerpo para combatir las infecciones. Por ello, las personas que padecen esta enfermedad tienen que mantener una buena higiene, controlar los niveles de azúcar en la sangre y acudir al médico ante cualquier infección para poder recibir tratamiento oportuno.
Estas son solo algunas de las muchas consecuencias que provoca la diabetes. Es importante tener en cuenta que el control adecuado de la diabetes puede ayudar a prevenir o retrasar la aparición de estas complicaciones. Por lo que el control y las visitas periódicas al especialista son fundamentales para las personas diabéticas.
