Viajar en coche por Europa con la familia es una de las mejores experiencias que he vivido en mi vida. Viajar juntos supone aprender a relacionarse, a tener paciencia, a conocerse y a comprenderse. Y sí, es verdad que puede haber muchos momentos tensos, muchos instantes de aburrimiento, cansancio o agobio, pero también es verdad que son los menos, y que merece la pena.
Normalmente nos vamos Pedro, la niña, y yo, no nos gusta dejarla, y nos lo pasamos muy bien con ella. Nos gusta que disfrute, que viva, que experimente y que tenga el valor suficiente para enfrentarse a las circunstancias desfavorables que pudieran presentarse en su vida. Por eso nos gusta realizar actividades con ella. Hacer excursiones, escalar montañas, atravesar ríos o volar… Claro que ahora que ya no es tan niña, demanda muchas más que aventura. Quiere conocer las diferentes culturas propias de los diferentes países, ciudades y pueblos que visitamos, empaparse de su tradición y por eso ahora el turismo cultural entre a formar una parte importante de nuestras vacaciones. Museos, ruinas y restos históricos, barrios emblemáticos, edificios importantes, y últimamente, la vida nocturna típica de cada lugar.
Claudia, que así se llama la niña que ya no es tan niña, ya tiene 18 años, y le hemos prometido que en el próximo viaje, esta vez a Alemania, le dejaríamos conducir una parte del trayecto. Es muy buena conductora y muy responsable también, por lo que tanto Pedro como yo confiamos en ella profundamente. Le hemos enseñado a confiar en nosotros y a decirnos la verdad siempre, sin temor a las consecuencias, ya que no hay nada peor que la mentira.
Así que Claudia está super emocionada planeando las mil cosas que quiere hacer a su llegada a Alemania, y sobretodo porque le hemos prometido que iríamos a la Selva Negra, un macizo montañoso al suroeste del país, famoso por sus frondosos bosques de abetos y sus lagos, como el Glaswaldsee, Mummelsee, Kirnbergsee, Feldsee, Titisee y Schluchsee, lugares todos muy turísticos.
En unos días nos ponemos en marcha, no sin antes pasar la revisión oportuna, por precaución más que nada, ya que un viaje como este exige una puesta a punto del vehículo. Lo hemos llevado a Talleres Paiz, especializados en BMW y MINI, aquí en Granada. En este taller cuentan con más de cuatro décadas de experiencia como taller de mecánica, avalados por la satisfacción y confianza que depositan sus clientes, ya que les ofrecemos un trato personalizado tanto en la reparación como en el mantenimiento de su vehículo. Su enorme profesionalidad les permite diagnosticar y solucionar los problemas de su vehículo con gran rapidez, ofreciendo el mejor servicio posible, con la máxima seriedad y garantía, por lo que constituye una alternativa al taller Oficial.
La Selva Negra. La Historia
Durante la época de los romanos se conocía a este macizo como la selva de la frontera, para indicar que se trataba de un límite natural entre su imperio y los Marcomanos o gente de la frontera, pueblo directamente relacionado con el pueblo Suevo.
La Selva Negra se ha hecho famosa, entre otras cosas, por haber servido de escenario a varias series y películas, así como por sus termas, como Baden-Baden, Bad Krozingen, Badenweiler, Bad Liebenzell o Bad Bellingen, las típicas casas campestres con su tejado de faldón característico, o los clásicos relojes de cuco.
En cuanto a su gastronomía cabe destacar la popular tarta de Selva Negar o su aguardiente de cereza o el aguardiente de cereza Kirschwasser.
Sus museos más famosos son los de Hermann Hesse, el de Vogtsbauernhof o el de Weil am Rheim
La industria relojera es muy importante en el país, siendo en la Selva Negra donde se concentran la mayor parte de las empresas tradicionales, de hecho aquí se encuentra uno de los relojes de cuco más grandes del mundo, Schonach.
La belleza de la Selva Negra, su paisaje, su historia, su cultura y la posibilidad de realizar actividades como el senderismo, lo convierten en el lugar ideal para viajar en familia, ya que además ofrece la posibilidad de hospedare a precios muy razonables.
¿Qué haces todavía aquí? Sal y disfruta.
